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Plástico

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Una de las afectaciones mas importantes para el medioambiente actualmente es el exceso de plástico en el mundo. Este llena y contamina todos los ecosistemas que conocemos y esta contaminación puede llegar muy lejos, por ejemplo a nuestro plato de comida. Al ser una de las maneras más eficientes y económicas de crear, envolver, cubrir, almacenar, etc., se ha convertido en una necesidad colectiva de todos los seres humanos, envolviendo al planeta en desechos plásticos.

Al día de hoy hay 150 millones de toneladas de plástico en el mar. Entran al mar aproximadamente 8 millones de toneladas anualmente, lo equivalente a que cada minuto se deseche un camión completamente lleno de plástico. Este número puede incrementar el cuádruple para 2050, y para entonces habría mas plástico que peces en los océanos del mundo. Se han producido aproximadamente 8.3 mil millones de toneladas de plástico desde 1950. Sólo el 9% de éste ha sido reciclado. Del 91% restante, 12% es quemado y 79% termina en vertederos y ecosistemas naturales.

En Colombia existe un consumo de aprox. 24kg de plástico per cápita, unas 1.25 millones de toneladas anuales. Generamos unos 12 millones de toneladas de residuos sólidos anuales de los cuales se reciclan únicamente un 17%. El 74% de envases de todo tipo terminan en rellenos sanitarios. En Bogotá se generan entre 6.300 y 7.500 toneladas de basura al día de las que se reciclan únicamente el 14%, por debajo del promedio nacional. Casi el 60% de todos estos residuos es conformado por plástico. En 2018 hubo una creciente de producción de este material de un 2.5%.

De todo esto, se ramifican distintos y más complicados problemas, como los son los microplásticos. Éstos miden entre 3mm y 1µm y se infiltran en el ciclo natural de cualquier ecosistema contaminando todos los posibles medios, suelos, aguas, y atmósfera. Son contaminantes que producen enfermedades y contaminan física (acumulación, sedimentación, migración), química (absorción y adsorción), y biológicamente (la entrada de los microplásticos a la cadena trófica). Al ser expuestos al sol, o al degradarse naturalmente de por sí, liberan metano y etileno, gases de efecto invernadero, afectando al cambio climático y demostrando que este material es una problemática que afecta al planeta desde su producción hasta su degradación.

El 99% de plásticos deben usar etano, subproducto obtenido mediante el fracking. Representando el 6% del consumo mundial de petróleo, igualando al sector de aviación. Si continúa el consumo de este de igual manera, este porcentaje subirá a un 20% y será el responsable del 15% de presupuesto anual de CO2 según el acuerdo de París. El consumo lineal y las fallas en el sistema de gestión de residuos sólidos han llevado a la acumulación y filtración de plástico en ecosistemas globales.

 

Respecto al impacto ambiental en los distintos ecosistemas, se sabe que 9 de 10 aves marinas, 3 de 10 tortugas marinas, y más de la mitad de ballenas y delfines han ingerido plástico. Más de 1200 especies marinas han sido impactadas negativamente por éste fenómeno. Incluso los crustáceos testeados en lo más profundo del Océano Pacífico occidental han ingerido éste, mostrando que el alcance de estos es ilimitado.

 

Este problema también está afectando al ser humano. Muchas comunidades de bajos recursos enfrentan un impacto a la salud al residir cerca de puntos de producción de plástico, o a vertederos de basura. Otras también son afectadas fuertemente debido a que dependen económica o socialmente de diferentes ecosistemas que presentan amplias variaciones negativas en sus ciclos naturales debido a la anormalidad ambiental que vive el planeta. Los ecosistemas como océanos, manglares y ríos son los más contaminados en Colombia, teniendo como ejemplo al Amazonas y Magdalena en la lista de los ríos más contaminados del planeta .

El manglar tiene una importancia ecológica altísima al igual que los mares y los ríos. Éste es el eslabón entre la vida marítima y terrestre. Protege, refugia y alberga una gran cantidad de especies, siendo y conteniendo microhábitats apropiados para la reproducción, desove, cría, y desarrollo de reptiles, peces y crustáceos.

¿Qué podemos hacer al respecto? Una de las mayores causas de esta problemática es que las empresas no consideran el ciclo de vida completo de sus productos y no se apoyan en un modelo circular para controlar sus desperdicios. Necesitamos adoptar modelos de producción y de consumo circulares que se asemejan a los ciclos de la tierra, que vayan en concordancia con los procesos biológicos en los que tenemos impacto. Para llegar a esto tenemos que cambiar nuestro estilo de vida como lo conocemos y aplicar diferentes prácticas y hábitos en este. Si quieres saber más acerca del problema del consumismo, haz click aquí.

 

Por otro lado, desde nuestra individualidad debemos de controlar nuestro consumo en la mayor medida posible. Es necesario ser conscientes de nuestras acciones y como afectan estas al planeta y a sus individuos; ponerse en la tarea de actuar consecuentemente con este conocimiento. Una de las mejores prácticas que se pueden adoptar en este momento son las botellitas de amor, si quieres saber más acerca de ellas, haz click aquí.

Fuentes:

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